sábado, 24 de junio de 2017

Una búsqueda interior



John Mayer parece haber dejado atrás sus días de Laurel Canyon, reflejados en los discos Born and raised (2012) y Paradise Valley (2013) y en los conciertos junto a Dead & Company, la banda satélite de Grateful Dead. Ahora, el cantautor regresa con un álbum pleno, cargado de R&B, soul y baladas, con letras sofisticadas y hermosas melodías, una especie de regreso al sonido de Continuum (2006) en medio de una búsqueda interior.

Funky por momentos, también suave y reflexivo, su voz brilla con nitidez en canciones que se amalgaman con facilidad. El comienzo tiene un feeling muy R&B: Still feel like your man es una delicada pieza melódica con un estribillo pensado para resaltar en las frecuencias moduladas. Emoji of a wave es una sedosa balada romántica, irresistible y conmovedora. En Helpless –sin relación con el tema de Neil Young- se destacan las guitarras eléctricas por encima de una base con mucho groove.

Love on the weekend es una invitación a subirse a un auto, con el volumen del estéreo al mango, y tomar la ruta hacia algún paraje lejano. In the blood es un tema que carga con cierta autocrítica y un cuestionamiento existencial -“Qué hay con este sentimiento de que nunca soy lo suficientemente bueno / ¿Se lavará con agua? / O estará siempre en mi sangre”- reforzado por el aporte vocal de Sheryl Crow. . Changing es una majestuosa balada en la que reflexiona sobre el paso del tiempo y lanza los solos de guitarra más intensos y efectivos de todo el disco.

Theme from ‘The search for everything’ es un intervalo instrumental donde nos deleitan guitarras acústicas y un soberbio acompañamiento de cuerdas y percusión. Moving on and getting over es una pieza souleada extraordinaria donde todo fluye con un ritmo irresistible. Never on the day you leave es otra hermosa balada, liderada por el piano de James Fauntleroy, donde Mayer fantasea con la idea de irse, atormentado por la decisión de tener que quedarse. Rosie tiene un roce de blue-eyed soul, al mejor estilo Hall & Oates, en donde unos delicados punteos acompañan la melodía con eficacia, mientras una sección de vientos envuelve el contorno sonoro. Roll on home, por el contrario, es el único tema de raíz más country-folk, que podría ser el nexo entre los dos discos anteriores y este. The search for everything cierra con You’re gonna live forever in me, otra tenue balada, agradable y armoniosa.

John Mayer muchas veces resulta impredecible y de tanto en tanto, cuando le gana el personaje mediático, insufrible. Pero es un gran compositor y un intérprete extraordinario, un músico que sabe apreciar lo mejor de la música de raíces para crear canciones originales. Definitivamente, John Mayer es una de las voces más originales de esta generación.




1 comentario:

Diego Gez dijo...

Me gustó lo de Mayer. Tiene un par de Tracks increíble, bien lafm que no pueden estar mejor producidos. Y el tipo toca muchísimo, muchísimo.